Palabras como flores secas.

Saber que puedes hacer algo que nadie más puede hacer.

Estos días de soledad, sin ti. Poco a poco mi ser se pierde No sé si es el tiempo o la edad pero ya lo resentí Que en tu ausencia todo me muerde A veces solo quisiera correr a buscarte Tomarte en mis brazos y sentirte otra vez. Y es que si pudiese de nuevo tomarte Te prometo amor mío nos saciaría hasta la vejez.

Es que dejarte de pensar es... Como dejar de vivir un poquito ¿sabes? Me gustaría que pudieras entender  No es nada fácil amor mío  Yo te creía mercer Ahora todo es un lío  Quisiera continuar mis palabras  Hace mucho no lograba conectar con ellas  Dentro de mi se resultan macabras ¿Si las saco se volverán bellas? Solo quiero ser bien Para mi, para ellos, por ti Por el amor bonito también  Que se entienda porqué partí. 

Porque en todo mi entorno encuentro amor. En el azul del cielo, en las nubes que lo adornan. En el verde del pasto, como sus flores amarillas, blancas y azules empiezan a brotar. En el aire fresco en un día soleado, ese característico olor cuando llueve. En las formaciones de agua que encuentro al caminar.  Ríos y lagos que interminablemente fluyen. Así quisiera fluir. Poquito a poquito lo siento. Me siento. Y el sentirte también ya fluye más. Ya no duele.

Porque son delgadas, finas, detalladas.  Delicadas, coloridas, únicas.  Palabras y flores que se usan como arte, protesta y guerra. Directas, frías, secas.